Esta gran foto la hizo la gran Sonia y el texto, el gran texto, es de Borges, un don nadie.
Más de una vez y de dos he sentido la tentación de copiar una conversación de Messenger y pegarla aquí, en Un mundo mejor para los caracoles. Es lo que tiene chatear con Otto y con Sonia principalmente (no se me vayan a enfadar los demás, que estos dos son especiales). El caso es que hoy, Otto, que como guionista tampoco tendría precio, se ha hecho pasar por el típico editor sin corazón que “incita” a escribir a la escritora frustrada y en un periquete ha montado un diálogo que quedaría que ni pintao en una peli neorrealista.
Yo era la escritora frustrada porque, desde ayer y hasta este momento, vivía en un quiero caracolear y no puedo un tanto agobiante. El problema radicaba en que, en un alarde ¿impropio? de narcisismo, quería contarles que ayer hice una más que aceptable paella para 30 personas y no encontraba el post adecuado para hacerlo. Y ahora que ya me he quitado el hipo analizo esa cierta necesidad de bloguear que tenía. Esa necesidad que no ha llegado a interrumpir del todo mi día a día ni me ha alterado los humores pero, al fin y al cabo, una necesidad de la que “necesitaba” resarcirme.
Y aquí estoy, caracoles, metacaracoleando en la medida de lo posible. Como ya les escribí mi carta de presentación la semana pasada (aquella declaración de inutilidad en lo que a nuevas tecnologías se refiere tenía cierta razón de ser, amigos) espero en lo sucesivo no tener que recurrir a coletillas como la anterior: “en la medida de lo posible”. Quiero decir que ya les he confesado que ni sofware, ni aplicaciones, ni sindicadores de contenidos ni nada que se le parezca, ya les he confesado que, muy a mi pesar, me manejo a tontas y a ciegas por la red. Advertidos quedan.
Y ahora, oh, le lanzo una pregunta al viento con la esperanza de que él me dé la respuesta: ¿qué finalidad perseguimos los mindundis con nuestros blogs de tres al cuarto o de dos al medio? No me malinterpreten, que yo estoy muy contenta y muy feliz con mis caracoles, con mi petit comité y conmigo pero no por ello voy a dejar de preguntarme por las razones aparentemente insondables que me llevan a dedicarle, con todo el placer del mundo, tanto tiempo come le dedico a este blog, ¿cómo lo ven ustedes?
Vaya, parece que el viento me acaba de contestar. Dice que no soy la única que invierte una buena parte de su día a día en la blogosfera. Espero que poco a poco me vaya trayendo una información más interesante, porque eso ya lo sabía yo. En cualquier caso: gracias, viento.
Efectivamente, caracoles, somos muchos en este mundo y somos muchos para todo. Nos centraremos en las artes por acotar un poco el tema y entonces diremos que dicen que hay mucho talento por la red repartido y, a poco que uno eche un vistazo, corroborará que lo que dicen es verdad: hay mucho talento por la red repartido. Qué de fotos, qué de vídeos, qué de myspaces, qué de reflexiones, relatos, microrrelatos y vidas literaturizadas. Cuántas ideas buenas tiene la gente, es asombroso y, como no podía ser de otra manera, cuánta mierdecilla hay por aquí también. No vamos a ser todos rubios, oigan.
También dicen que hay más creadores que "consumidores". Yo a este respecto sólo puedo decir que desde que Un mundo mejor para los caracoles empezó a coger forma, devoro muchos menos blogs personales y ajenos (los temáticos son otra historia, ¿no?). Los sigo devorando, claro, pero lo hago con mucha menos frecuencia y con mucha menos intensidad. Ais.
Díganme, caracoles creadores, ¿qué fines persiguen con sus páginas personales?
En el próximo capítulo de “metacaracoleando ando” intentaremos despejar esa cuestión: ¡Compartan sus consideraciones!
#MockingGod, burlándose de Dios
Hace 12 horas
4 comentarios:
No me ha dado tiempo a leer el post, pero te comento una cosas en pocas palabras: Nos han dado a Ana Torres y a mí una beca Leonardo a Amberes y nos vamos el día 28 de febrero las dos para allá a trabajar como "asistentes de producción cultural"
:D
!!!
Arrea Marian, enhorabuena!!
En cuanto a lo de los blogs, a mí cada vez que me preguntan por qué me abrí uno, siempre respondo lo mismo: por una necesidad comunicativa. Todos tenemos cosas que contar y que decir, y el blog a algunos nos da esa salida, es otro 'arte' (salvando las lógicas diferencias); cada uno se expresa como quiere o como puede, y el blog es una forma de expresión verdaderamente magnífica y totalmente democrática.
No sé a quién le dijo un día Buenafuente: ¿pero hay tantas opiniones como blogs? Quizá no, pero lo que está claro es que internet ha acabado con clasicismos estúpidos. Antes sólo podían hablar los señoritos que tenían acceso a los medios de comunicación. Ahora podemos hacerlo todos.
Ahora hay mucho más blogs y mucho menos tiempo para leerlos, pero eso también nos hace más selectivos. Es la selección natural
Bueno, ahora ya sí que lo he leído... Pues es una reflexión que más o menos yo también me he planteado alguna vez. En general internet es super útil y democrático, pero para mí personalmente es un agujero sin fondo... me explico: podría pasar horas leyendo solo los artículos de la gente que conozco y cuya opinión me interesa (por ejemplo éste blog), y a veces lo hago. Otras veces prefiero salir a la calle a dar una vuelta, leer un libro de esos de papel, hacer un estofado, hablar con mi madre por teléfono o beberme una botella de vino. Me encanta internet, pero alguna vez he tenido que decirme a mí misma que el mundo está ahí fuera.
Fdo: ex-diseñadora gráfica que pasaba 9 horas al día sola con un ordeñador
PD: bueno, y en cuanto a mi blog, siempre que tengo algo que enseñar, lo hago, es decir, no muy a menudo. (jaja)
Un beso NAtalla! dime tu skipe (otra cosa de internet cojon***) y te cuentooo!
¡Enhorabuena, marian! Qué guay, me alegro un montón y estamos super cerca... ahora mismito me pongo a buscar vuelos.
¡Que se mojen los de los fotologs! :)
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